sábado, 11 de noviembre de 2006


25-07-09 (Ya lo se, que si que si, pero es que el nueve me gusta, asi como las gambas).

El dia tardó en llegar lo mismo que lo que tarda en llegar una avispa a la luna, es decir, nada. Nos levantamos como Vikingos y fuimos a sakear el Supermarket para preparar los bocadillos de paletilla de buey y chorizo pal barquito. Si señores, Un VELERO PA TO LOS ITAKEÑOS.
Llegamos puntuales como británicos y nos dispusimos a subir al belerito cuando apareció Mario (No confundir con cantinflas) nuestro Santo Patrón por ese dia. Llevaba un belero de bolsillo con lo que la primera impresión fue de incredulidad. Era una lancha hinchable de esas que echan con los aviones de publicidad en las playas. AHHHH, el barco estaba en el pantalón, platano patalinio… o como se llame.
QUE LUJAZO, DAMAS Y CABALLEROS!!!!!!
Si me pusiera a describir las sensaciones estaría hasta que las ranitas tuvieran orejas. Salimos de puerto y navegamos a vela durante un rato, hasta que llegamos a una cala. PRECIOSO el BUCEO por las calitas. Todos estaban sobre la cubierta como pescados mientras servidor no paraba de dar saltos como un niño, despertandolos pa que jugaran conmigo a tirar una pelota y yo bucear y recogerla.
Aunque parezca de una determinada edad, después saque mi mejor intelecto y debatimos sobre la conveniencia entre lo público y lo privado. Los escuchantes iban cayendo por el sopor hacia delante, no se si por nuestras disquisiciones, por la biodramina o el alcohol. La verdad es que me quede solo hasta que saque el tema de si era moralmente aceptable la micción en la via pública. Madre mia, tos participando en el más acalorado debate que vi nunca.
Tomamos mate argentino y nos dejó llevar el barquito. Txema hizo varios trompos y Maria, acostumbrada al cantábrico, nos sacó varias volteretas.
Al Gustavo lo tuvimos como Bribón de A bordo, ya que se pasó 15 horas durmiendo. Cuando se le mandó que rodará una manivela lo hizo de acostao, el tio. Viendo la habilidad, lo pusimos de vigia en proa (Que es la parte de atrás, pa los lechones que no sepan de marina) pa ver si pillabamos baches.
15 o 114 pillamos. Viendo su eficiente trabajo lo ascendimos a capitan de las velas y le dijimos:
- Mira las velas pa que no se rompan, rico.
Tengo que decir que ese trabajo lo hizo con eficacia alemana, digna de un ingeniero de su clase, pues no se rompieron y llegamos a puerto sanos y calvos.

Por cierto, si alguno quiere alquilar el barco, os dejo el correo del dueño, que es supersimpatiquisimo, agradable y de mu buen ver…

raulescriva@gmail.com
El final de la travesia hizo que llegáramos a puerto arriando velas, escondiendo los cañones de las escotas, bajando la mayor y con 9 tripulantes totalmente extasiados de lo que habian sentido. Recogimos los trastos y bajamos a puerto. Nos extrañamos de ver a Raulito (Pino puente, acordaros) con tremendos fardos sobre sus espaldas. Nos dijo que se lo había encontrado en el mar y que se lo había de entregar preciso al “Camichi”. Eran de un color marrón pero nadie puso peros cuando los ató con dos cuerdas a la vaca del coche.
Directamente, llegamos a nuestros aposentos donde tuve una conversación muy interesante con Gustavo y Txema sobre la mi impresión de lo que era Itaka y lo que podía llegar a ser. De momento, ya me he adelantado a mis siempre alabados y nunca suficientemente loados “administradores” y he reservado las 4 últimas plantas de las torres Quío en Madrid para que puedan realizar su trabajo en un entorno idílico. Por otro lado, Iberia ha aceptado nuestra propuesta de establecer descuentos entre los abonados a Itaka (Ya que cogen aviones como si fueran autobuses) y de entrar en la promoción de este verano (Vuela con nosotros y te regalamos un cucurucho y un higo chumbo), así como he mandado que se repartan folletos (No pongáis otra e donde no la hay, ehhh!!! Que os conozco y os veo venir, mentes calenturientas!!!) en las playas.
Finalmente, Gustavo me aconsejó hablar con nuestros distinguidos administradores para estudiar las posibilidades, con lo que desde aquí me ofrezco para lo que deseéis.
Sigo: Nos duchamos y nos pusimos nuestras mejores galas para ir a cenar a un restaurante del Puerto de Mahon. Obvio el nombre porque si lo pongo iréis vosotros solos y obviareis a nuestro Diego “el cigala”, poseedor de la mejor agenda de restaurantes en Menorca. Llegamos y aparcamos. Aparte a los fotógrafos que allí habian con dos buenas collejas y por el pinganillo que llevaba me informaron que había otro paparazzi escondido detrás de la farola. Con mis hercúleos brazos lo levanté por encima de mi cabeza y lo tiré al agua del puerto. Entonces dije por el micrófono que llevaba en el cuello de la camisa: Luz Verde!! Y me dispuse a abrir la puerta para que bajaran las dos Miss Kedadas 2005. De pronto, un millón de personas se abalanzaron para pedir autógrafos, con lo que tuve que hacer un pasillo y ponerlas a las dos, una sobre cada hombro, para que pudieran llegar al restaurante sanas y salvas. No sabéis lo duro que es ser Bodyguard de estas chicas. Nos sentamos ya tranquilos y comenzamos ha comer pasta italiana y pizzas. Que delizziosas estaban!!! MMmmmmm!!!!. Yo me pedí pasta picante y al tercer bocado se me hinchó la vena del cuello y se me enrojecieron los ojos. Poco a poco me saltaban las lágrimas pero yo aguantaba estoico las embestidas que en mi boca se producían por el picante. Cuando Maite dijo que la pizza estaba un poco fría, le dije: Trae pacá!!!- y con un soplido se calentó al instante. Madre mia!!!.
Hablamos de todo y pase a filmar la segunda parte de mi documental encargado por el Nacionalgeografic y titulado “De Menorca al cielo”. El Txema se estaba comiendo una pizza que parecía un supositorio de dinosaurio, el tio!!!. Maria y Carmen tomaron sus respectivas salsas bañadas en pasta. Gustavo estaba reponiéndose del duro dia de trabajo en el barco, y se estaba comiendo 15 pizzas, una sobre otra. Se le desencajaba la quijada en cada mordisco!!!. Raulito tuvo sus habituales trabucadas y el Diego aportó su clase y generosidad dándome el relevo en la protección de las Misses.
Abandonamos el restaurante saciados y subimos a un barco que había en la puerta del restaurante. Diego nos dijo que íbamos a una discoteca que se llama Can Xoroi. Venga pues!!!. Durante el trayecto me arranqué por Concha Piquer, dado que se había roto la radio baliza y no podíamos poner cdses. Canté “y sin embargo te quiero”, cosa que fue aplaudida por los otros barcos que había en la inmensidad de la noche. Pensaban que era un Sireno y se lanzaban al agua. Después de la bella canción, Raulito me felicitó e hicimos las paces, por lo de la otra noche (Os acordáis de los culitos!!!). El viaje avanzaba hasta que divisamos a lo lejos una mole de piedra. Tierra a la vista!!! Dijo nuestro Vigía Gustavo que habíamos vuelto a poner en la proa con cinturón de seguridad y airbag dado el buen trabajo de la mañana. Nos acercábamos poco a poco, pero el barco no paraba. Madre mia!! Nos vamos a dar un piño cuando lleguemos que tal. A 2 metros de la piedra salieron dos cuerdas de un balcón que había en la piedra. Ostras! Teníamos que escalar pues la disco estaba incrustada en la roca. Nunca había visto nada igual. Que delicia! Nos dispusimos a escalar la roca por las cuerdas, poco a poco. Yo tuve que realizar 5 viajes más dado que Maite, Maria, Carmen, las misses y Txema llevaban tacones y no era plan subir en vertical. Los tacones de este último se me incrustaron en los gemelos y a punto estuvimos de caer al agua. Chico, cómprate los zapatos en lUI VUTON acordes con tu clase. Estuvimos bailando y disfrutando del paisaje. Que chulo!!!! Era una discoteca de LUJO PARA UNA GENTE DE LUJO!!! Cuanto disfrute!!. Hicimos una reunión para organizar el dia siguiente en la sala de juntas. Después volvimos y estuve hablando con Marisol sobre pintura, lo que nos gustaba del arte, que si Van Eyck, que si Picasso. QUE BONITO, verdad?. Nos tomamos una copita en la terracita de la disco y descubrimos que los demás se habian ido con el barco. Como siempre, nos quedamos los WARRIORS. Como somos genete de recursos y esa noche íbamos de Dart Wader (Íbamos de Negro los 3 componentes) cogimos a Txema Skywalker y Raulito Chebaka y volvimos a casa volando en la Interprise.
Después de los dos dulces besos de buenas noches a las misses, volvimos a llamar a Gustavo para que nos abriera como era habitual en casi todas las noches, dado que Mi Txema cambiaba los códigos de entrada y no podíamos abrir. Gustavo, después de la tercera vez que le despertábamos, nos dio las buenas noches y nos arropó para que pudiéramos dormir bien.

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